Mendoza reconoció la labor de docentes coformadores

Las jornadas de Desarrollo Profesional Docente promovieron el encuentro e intercambio entre supervisores, directivos, profesores de Nivel Superior y docentes coformadores.  

Mendoza reconoció la labor de docentes coformadores, supervisores y directivos del sistema educativo público que participaron de las jornadas de Desarrollo Profesional Remunerado dictadas por Educación Superior.

Estas jornadas resultaron un espacio de encuentro y construcción colaborativa, al que asistieron más de 2.000 docentes, supervisores y directivos de toda la provincia, que trabajan en las 550 escuelas asociadas para acordar lineamientos, compartir experiencias y ahondar en los procesos formativos que deben promover en los alumnos de profesorados y carreras docentes que están realizando sus prácticas y residencias. 

La coordinadora jurisdiccional del Observatorio de Prácticas Educativas, e integrante del equipo técnico de la CGES, Elida Hodar, destacó que las jornadas para coformadores se constituyeron como un hecho inédito en la formación de docentes porque, si bien siempre hubo un vínculo entre los equipos de prácticas de los institutos formadores y las escuelas asociadas, en esta oportunidad se dispuso de tiempos y espacios compartidos con supervisores, directivos, profesores de Nivel Superior y docentes coformadores, y se trabajó en forma conjunta en la mejora de la formación de los futuros docentes de nuestra provincia. 

La referente señaló que “generar espacios de encuentro e intercambio, reconocidos académica y económicamente, es fundamental si pretendemos una articulación real del sistema. Sentarse a dialogar, acordar objetivos comunes, responsabilidades compartidas, estrategias de acompañamiento y de evaluación de las prácticas de los futuros docentes no es una tarea menor, requiere del compromiso de todos los actores del sistema, y la DGE ha apoyado este pedido que veníamos haciendo desde las instituciones formadoras y las escuelas asociadas a través de las jornadas de desarrollo profesional remuneradas”.

En relación al desarrollo y alcance de las jornadas, Hodar agregó que “han sido un insumo fundamental para fomentar espacios de diálogo e intercambio entre las instituciones que tenemos la responsabilidad de formar a los futuros docentes. Los resultados se hicieron notar desde cada uno de los comentarios que nos llegan de docentes de distintos lugares de la provincia, además de tener propuestas de mejora en la dinámica de las prácticas profesionales de los estudiantes en vistas del ciclo lectivo 2024, con una mayor participación de los y las docentes de escuelas asociadas”. 

La labor de los docentes coformadores es fundamental, guiando y acompañando el proceso de enseñanza, al trabajar en red junto a los equipos de Práctica Profesional de los Institutos Superiores de Formación Docente (ISFD), y a supervisores y directivos de las escuelas asociadas que tienen a su cargo el seguimiento individualizado de la formación en terreno de los futuros docentes. 

Las profesoras Silvia Adre, Antonela Sorichetti y Carla De Monte, de la escuela técnica 4-113 Ingeniero Jorge Barraquero, expresaron que “los coformadores solíamos tener un rol pasivo, quizá por desconocimiento o por no tener las orientaciones específicas. Acompañábamos en silencio. A partir de las jornadas realizadas con el instituto 9-007, pudimos interiorizarnos sobre algunas cuestiones como el reglamento de prácticas, conocer las funciones del coformador y de las instituciones secundarias o primarias. Desde este ciclo pudimos acordar con las profesoras que están formando a docentes, qué aspectos son importantes fortalecer y reconocer aquellos en los que se desempeñan muy bien”. 

Al ser consultadas sobre la experiencia que les dejó participar en las jornadas de Desarrollo Profesional, destacaron que “la verdad es que fue valioso, nos motivó a trabajar a conciencia, no por obligación. Colaborar como coformadores implica más atención, compromiso y tiempo dedicado a un practicante, en el aula que nosotros conocemos y, aún así, a veces es imprevisible. La experiencia de las jornadas ha sido un acierto que nos permitió trabajar de modo conjunto como nunca antes habíamos trabajado”. 

Fuente: Prensa DGE