Primera Infancia

«Al principio de todo, la literatura es voz y a mí me encanta decir que los niños leen con las orejas, como los poetas. A los niños no les importa qué dicen las palabras sino cómo lo dicen, cómo lo envuelven, cómo cantan. Tiene que ver con el corazón, con los ritmos de la vida. Eso es lo que hechiza a un niño. La voz es la primera impronta simbólica en un bebé y es portadora de afecto. La voz, la oralidad, viene de muy atrás »

La enseñanza de la literatura en la primera infancia es un tema que invita a la reflexión sobre qué se entiende por literatura y cómo pueden participar activamente los niños y niñas menores de 3 años en experiencias literarias significativas. En este sentido, es fundamental analizar los saberes a enseñar y su abordaje en las salas.

Desde esta perspectiva, podemos pensar en tres dimensiones clave en la enseñanza de la literatura en la primera infancia:

  1. La literatura como saber a transmitir: Enseñar literatura implica ofrecer y compartir textos literarios, asegurando que niños y niñas tengan acceso a cuentos, poesías, nanas, canciones.
  2. Las prácticas del lenguaje vinculadas a la literatura: Se enseñan a través de acciones específicas que se realizan con los textos literarios, como escuchar, leer en voz alta, dialogar sobre los relatos, anticipar acontecimientos, cantar y jugar con el lenguaje.
  3. La sensibilización frente a los textos literarios: Enseñar literatura también supone generar experiencias que propicien emociones, sentimientos y sensaciones en los niños y las niñas, promoviendo actitudes de disfrute, exploración y curiosidad ante las producciones literarias.

“Lecturar reúne algo del verbo leer y algo del verbo amar. Algo así como trasvasar amorosamente a los otros el equipaje y las habilidades iniciales para construir, cada vez con mayor autonomía, la experiencia plena y emancipatoria de la lectura. Por eso lecturar supone una relación de compromiso e intimidad entre quien lectura y quien se lectura, como condición misma de la experiencia” (López,2020).

Cuando una niña o un niño escucha un cuento:

  • encuentra un espacio para imaginar a través de palabras, gestos y caricias;
  • un vínculo amoroso se va construyendo;
  • descubre una estructura de unidad con principio, desarrollo y fin que le ofrece un sentimiento de continuidad.

Al cantar, jugar con las manos, decir pequeñas rimas a veces sin sentido, pero cargadas de la música de la lengua poética, las educadoras y los educadores generan un territorio de emociones compartidas con las niñas y los niños. La sensibilidad y el lenguaje se imbrican y permiten la potencialidad de una experiencia estética, el descubrimiento de la voz como el primer instrumento musical, de la palabra como juguete y poesía. Cuando esos juegos están permeados por la ternura y la dedicación, producen una envoltura sonora, una membrana afectiva que sostiene y acaricia a través de la voz. Envoltura de cuidados y envoltura narrativa, envoltura sonora mediada por la ternura.

La relación de los más pequeños con la literatura, es ciertamente imposible sin un adulto que participe «dibujando puentes” de encuentro entre esos dos mundos tan apasionantes. El cuerpo, la voz y la escucha disponibles de la maestra se convierten en un factor fundamental de la planificación: en los objetivos, en las acciones y en los materiales.

Como objetivos: contener, integrar, entender, envolver, observar, significar.

Como acciones: abrazar, acariciar, cantar, jugar, estar en el plano para que puedan acceder a ella cuando lo necesiten.

Como materiales: voz sonora, amorosa por conocida y cargada de significaciones afectivas, generadas cada vez que la maestra cantó para dormir, para calmar un dolor, para consolar, para jugar y divertirse; cuerpo piernas/brazos/manos cargados de significaciones porque abrazaron, acariciaron, fueron soportes para pararse, bailaron juntos la música que tanto placer les dio. Ojos y oídos receptores, atentos, entregados.

¿Qué puede ofrecer el jardín maternal para enriquecer las experiencias literarias en este mes de la lectura?
  • Las Nanas para bebés son la primera experiencia de encuentro de niños y niñas con la literatura, en su fusión armoniosa de música y texto poético. 
    🔗 Ver video

    ● Experiencias de lectura y narración de cuentos por parte de los docentes y miembros de la comunidad.
    🔗 Repositorio de cuentos de EDUCAR

    ● Experiencias con poesías que poseen un atractivo para los niños y niñas, porque les acerca un mundo en donde la palabra toma otro valor y es explorada en su materialidad sonora y rítmica.
    🔗 Una propuesta posible es con poesía mojada y poesía colgada 

    ● Participar de la escucha compartida con el grupo de pares de lo que la docente lee o narra es una experiencia rica que promueve intercambios verbales.
    ● Una propuesta placentera y fundamental para los niños es escuchar canciones entonadas por el docente, La variedad de estilos, características rítmicas y melódicas enriquecerá el bagaje cultural de los niños.
    🔗 Video: Música deambuladores

    ● Vivenciar escenas con títeres: Con los más pequeño/as, realizar frente a ellos, breves escenas con títeres, paulatinamente podrán iniciarse en la utilización de los títeres de manejo sencillo (los de dedo, los de varilla, los de cono, y los que permiten mover la boca del muñeco) para representar escenas cotidianas, jugando con títeres.