
José de San Martín: Mentor de la «Mendocinidad»
Mendoza «fue otra» tras el paso de San Martín por la provincia, erigiéndose en un mito fundacional de fuerte valor simbólico para la historia mendocina, que lo convierten en el máximo referente local.
Mendoza «fue otra» tras el paso de San Martín por la provincia, erigiéndose en un mito fundacional de fuerte valor simbólico para la historia mendocina, que lo convierten en el máximo referente local.
Cuando José de San Martín cruzó los Andes no sólo se preocupó de llevar soldados y armas, también se ocupó de transportar una imprenta y libros con ideas revolucionarias y libertarias.
Fray Francisco Inalicán era de sangre americana de los pueblos americanos. Actuó como intérprete en los parlamentos que se hicieron durante la organización del Ejército Libertador y realizó visitas a las tolderías para llevarles mensajes del General.
Todos los meses, el tercer jueves de cada mes, con una importante presencia de público ubicado frente a las escalinatas de la Casa de Gobierno, se realiza adelante el cambio de guardia de la Bandera del Ejército de los Andes.
El 13 de marzo de 1904, durante el gobierno del Dr. Carlos Galigniana Segura, se inauguró el monumento en el límite argentino-chileno. La iniciativa de
Por el camino que conduce al Paso del Portillo, en la ruta hacia Chile, existía un árbol centenario con un poderoso tronco y coposo ramaje.
En el año 1608 el provincial Padre Diego de Torres Bollo fundó en Mendoza una residencia de la Compañía de Jesús para que los jesuitas
El 20 de enero de 1817, el coronel Las Heras al frente de su división llegó a Uspallata y permaneció allí hasta el día 29 del mismo mes.
La provincia puede mostrar a habitantes y visitantes los lugares estrechamente vinculados con la gesta libertadora, desde la casa que habitara en la Capital, los escenarios de la formación del Ejército de los Andes y la ruta que a través de la montaña va mostrando los hitos de la marcha de la División de Vanguardia hasta su ingreso al territorio chileno.
El 12 de octubre de 1816, el general San Martín solicitó modestamente al Cabildo de Mendoza, la cesión de cincuenta cuadras de tierra con el objeto de afincarse en ellas una vez concluida la campaña que lo llevaría a Chile y Perú.