La escuela Adolfo Pérez Esquivel realizó un Taller de Educación Sexual Integral para familias de primer y segundo año

En el marco del Programa ESI de la DGE, la escuela es una fuente inagotable de aprendizaje, donde el fortalecimiento de las subjetividades y el desarrollo de habilidades psicosociales son, en conjunto con los contenidos temáticos, los desafíos más importantes de la escuela como formadora de ciudadanos libres y autónomos.

La comunidad educativa de la escuela 4-128 Adolfo Pérez Esquivel, de Ciudad, a cargo de su directora Mariana Marino, llevó a cabo el taller de ESI dictado por la tallerista de la institución, Marisa Lorca, cuyos destinatarios fueron las familias de los y las estudiantes de primer y segundo año, con el objetivo de poner en valor las acciones que se llevan adelante desde el programa de ESI (Educación Sexual Integral) de la DGE en la comunidad educativa. Es creciente la preocupación por la dificultad que muchas veces las y los estudiantes presentan en la toma de decisiones y resulta importante poder pensar qué intervenciones pedagógicas tienen parte en la cuestión y de qué modo pueden ser trabajadas.

En este aspecto, el nuevo Código Civil plantea el principio de autonomía progresiva que se asienta sobre la responsabilidad de la escuela de generar un ámbito de decisión que compete exclusivamente al niño, niña y adolescente y que se irá ampliando en la medida en que crezca en madurez (la concepción de la autonomía progresiva). De este modo, la escuela se reconoce como favorecedora de las condiciones de posibilidad para el diseño en libertad del propio plan de vida de las y los estudiantes.

Marisa Lorca expresó “considero que durante el ciclo lectivo 2024, se puede cumplir este objetivo, poniendo énfasis en el desarrollo psicosocial de las y los estudiantes y la vivencia de la sexualidad desde un ámbito de respeto, libertad y responsabilidad. De esta manera, la planificación de los talleres de Educación Sexual Integral se desarrolla teniendo en cuenta los contenidos curriculares, los ejes de la ESI, los núcleos de aprendizajes prioritarios y los factores emergentes que suceden en la organización de la vida institucional”.

“Por lo tanto, este año comenzamos con talleres para familias, realizado con la metodología de taller vivenciando las familias el modo en el que se trabaja la ESI (Educación Sexual Integral), en la escuela, incluyendo y generando el compromiso de construir puentes, alianzas, un espacio educativo entre la familia y la comunidad educativa, los cuales se desarrollan semanalmente, con una lógica pedagógica secuencial respetando las necesidades de cada curso y de  cada edad”, concluyó Lorca.

Fuente: Prensa DGE