En el marco del proyecto institucional denominado Cerramos un ciclo, celebramos cada recorrido, la institución educativa implementó una propuesta que celebra los logros y esfuerzos, promueve el sentido de pertenencia, la continuidad educativa y el reconocimiento de cada trayectoria infantil.
La escuela Israelita Doctor Max Nordau de la Ciudad de Mendoza, a cargo de la directora Claudia Sureda, perteneciente a la Supervisión 1, a cargo de Fabiana Robles y a la Supervisión 2, de Nivel Inicial de Educación Privada de la DGE, a cargo de Silvina Mauirino, llevó a cabo la unificación del acto de cierre anual con el tradicional acto de egreso de los niños y niñas de las salas de 5 años del Nivel Inicial, decisión institucional que surgió a partir de una reflexión pedagógica profunda del equipo directivo, SOE y docentes, orientada a repensar las prácticas escolares desde una mirada inclusiva y respetuosa de las trayectorias reales de los niños.
Cabe destacar, que la innovadora propuesta, bajo la responsabilidad de Claudia Sureda, directora de la institución, Celeste Del Curto, coordinadora del nivel inicial y docentes de sala, de áreas especiales y talleres, contó con el aval de la DGE y se fundamenta en los lineamientos del Diseño Curricular de Nivel Inicial, que prioriza el reconocimiento de los procesos personales, la diversidad de tiempos de aprendizaje y el derecho de todos los alumnos a participar de una misma celebración, sin distinciones ni segmentaciones, con coherencia institucional y pedagógica, poniendo en valor el desarrollo integral infantil y la construcción colectiva de aprendizajes, afectos y vínculos sin marcar una frontera entre quienes egresan y quienes aún permanecen, porque todos forman parte del mismo ciclo educativo.
El acto implicó una celebración conjunta que se desarrolló con el formato de “El Gran Circo de la MAX”, con una Muestra de Educación Física por cada sala, que tuvo como protagonistas a los 47 niños que conforman el Nivel Inicial, con la práctica de actividades lúdicas, como circuitos de habilidades motoras básicas, motor grueso, de equilibrio, rondas infantiles con el uso de variados elementos y la interpretación de divertidas canciones.
La presentación de las muestras comenzaron con la Salas de 1 año con “Los Mini Payasitos”; de 2 años “Los Malabaristas de la Alegría”; de 3 años “Los Equilibristas Soñadores”; de 4 años “Los increíbles magos” y de 5 años “Los Acróbatas del Movimiento”. Luego bailaron y cantaron la canción en hebreo “Haguf sheli” y en Inglés una canción de arcoíris y se compartió un emotivo video con las experiencias de sus aprendizajes.
Finalmente, entre emocionados aplausos se hizo la entrega de Diplomas y obsequios como símbolo de sus logros y crecimiento en su trayectoria durante el ciclo lectivo 2025, con un destacado acompañamiento de las familias.
Al respecto, Sureda destacó que: “el juego es uno de los lenguajes más profundos de la infancia” y que en este acto habló el lenguaje del cuerpo, la música, el movimiento, la imaginación, la alegría y el vínculo, “celebramos un año lleno de experiencias valiosas que los niños y niñas han logrado juntos en el proceso cotidiano de aprender, la mirada educativa de nivel inicial se renueva, la práctica educativa cotidiana nos invita a revisar lo que hacemos, a cuestionar, a proyectar y planificar mejor. Vemos a nuestros Yeladim (estudiantes) como sujetos capaces, llenos de recursos, ellos son protagonistas reales que piensan, deciden, construyen sentido, se vinculan, cooperan y transforman”.
“En nuestra escuela acompañamos y celebramos procesos, no sólo resultados, con un equipo docente profesional, sensible y comprometido a formarse e innovar, que se detienen a observar y a escuchar para intervenir con respeto y sentido, y diseñar experiencias significativas donde la calidad educativa se construye”, agregó la directora.
“Pongo en valor la ética de cada uno de los Morim (maestro) y la coordinación del nivel inicial como la clave en este proceso y expresó con orgullo, agradezco a Morá Celeste, su mirada amplia y respetuosa, que hizo posible esta construcción colectiva y a cada uno de los Morim del Nivel, nuestra tradición dice “Educa al niño según su camino, y aún cuando sea grande, no se apartará de él”, Mishlé-Proverbios 22:6. Por ello, sigamos educando con respeto a la singularidad de cada uno, construyendo caminos de luz, de juego, descubrimiento y de comunidad, confiando en la fuerza maravillosa de la infancia”, concluyó la directora.
En este sentido, la institución capitalina, consolida su compromiso con la educación, centrándose en el fortalecimiento de las infancias con un enfoque integral, que busca garantizar el desarrollo pleno en un entorno inclusivo y motivador.







Fuente: Prensa DGE



