Alumnos de sala de 4 años de la institución de La Paz participaron del proyecto institucional de alfabetización, con una significativa experiencia donde la lectura se transformó en una herramienta pedagógica para desarrollar el lenguaje, la creatividad y fortalecer vínculos.
En la escuela albergue 8-417 Rubén Darío, del distrito Desaguadero, departamento de La Paz, bajo la dirección de Fabiana Orlando y el trabajo conjunto de la docente de sala de 4 años, Gisela Belén Rosales, sus 12 estudiantes y las familias, crearon un libro de cuentos digital, lleno de aventuras y magia, con el nombre El Jardín de los Sueños, una propuesta para vincular el descubrimiento del sistema de escritura convencional a través del trabajo con el nombre propio, considerando a éste, como una estrategia primordial para desarrollar la identidad personal, emocional, que le pertenece y lo acompañará toda su vida.
Se trata de una propuesta que forma parte del proyecto institucional de alfabetización temprana e inicial, que explora a través de actividades interactivas, creativas y divertidas centradas en su nombre escrito, donde las y los niños aprenderán a identificar las letras y sonidos que lo conforman, promoviendo así el desarrollo de habilidades de escritura temprana. Además, de trabajar en su autoestima, “si me acepto y me valoro puedo aceptar a los demás” y así lograr que cada alumno tenga confianza en sí mismo y sea capaz de llevar a cabo lo que se proponga en cualquier ámbito de su vida.
En este sentido, todo aprendizaje que se alcanza en Nivel Inicial, además de logros cognitivos, tiene una carga emocional importante, de tal forma que el acercamiento al conocimiento de los textos debe enmarcarse en la comunicación, el desarrollo socioemocional, la construcción de la identidad personal, autonomía y autoestima a través de la educación emocional.
Es así que esta experiencia enriquecedora fomenta la creatividad, la imaginación, el trabajo en equipo, al tiempo que promueve un aprendizaje significativo a través de una gran variedad de actividades lúdicas que garantiza la exploración de los cofres de colores, el programa Aprender Conectados, ESI, las propuestas para el Mes de la Lectura en Voz Alta, los proyectos institucionales como Alfabetización Temprana e Inicial: Desarrollo del Lenguaje y la Comunicación bajo el nombre: Descubriendo el Mundo de la Alfabetización y el proyecto Institucional Matemática y Desarrollo, en el marco del Programa Mendoza mejora aprendiendo Matemática, bajo la denominación Juego y aprendo las matemáticas, ofreciendo propuestas alfabetizadoras y dando uso a un recurso tan valioso del programa “Queremos aprender”. Todo esto resulta posible utilizando variadas estrategias metodológicas donde ellos serán protagonistas de las mismas.
Rosales detalló que la propuesta surgió “cuando los estudiantes preguntaron por qué es importante su nombre. Es allí que todas las actividades estuvieron relacionadas principalmente con alfabetización temprana e inicial, mediante la confección de tarjetas de identidad, actividades lúdicas, emocionales y la lectura de historias maravillosas, adivinanzas, recetas, poesías, entre otras cosas. Luego, a partir de la escucha activa del relato ‘Yo quiero Ser’, pudieron construir su propio personaje y en casa junto a la familia muy entusiasmada crearon un cuento, hermosas producciones donde el principal protagonista era su hijo. Finalmente, los pequeños presentaron sus cuentos en el jardín, todos expectantes y felices escucharon las aventuras, donde cada estudiante lució el traje o accesorios del personaje, siendo el protagonista de su historia que salían de un gran libro y recibían merecidos aplausos por tan maravillosa creación”, relató la docente.
En tanto, Fabiana Orlando expresó: “más allá del trabajo final, lo más importante fue el proceso, el tiempo compartido, las ideas que surgieron en conjunto, la participación activa de las familias y el orgullo con el que los niños trajeron sus producciones al aula. Desde la escuela, valoramos profundamente estas instancias porque entendemos que la familia ocupa un lugar central en la vida de cada niño, y cuando se involucra en los proyectos escolares, se genera un puente de confianza y acompañamiento que enriquece los aprendizajes”, concluyó la directora.
Por último, Rosana Albornoz, supervisora de la sección 12, destacó: “es un proyecto interesantísimo, enmarcado en el proyecto de mejora institucional de la escuela, uno de los proyectos que se formularon en el mes de febrero luego de las jornadas institucionales que propuso el gobierno escolar y claramente refleja todo lo que el nivel inicial necesita en una sala”, a lo que agregó, “Un trabajo mancomunado con la familia, que es parte y protagonista acompañando a su niño o niña, donde desde factores contextuales han logrado diseñar, armar un relato que lo represente a partir de una idea clave que el niño genera desde su interés y que a partir de ese relato pasa a ser el protagonista de cada cuento, por eso la cantidad de cuentos que contiene la antología coincide con la matrícula de la sala, con una docente creativa e innovadora a cargo, que ha sabido capitalizar este interés de los pequeños, el acompañamiento de las familias, el entender de la esencia del nivel inicial y la importancia del desarrollo del lenguaje y de la cognición”, finalizó la funcionaria.
De esta manera, la comunidad educativa de la escuela Rubén Darío pone de manifiesto que, desde los primeros años de escolarización, niños y niñas inician un aprendizaje como una aventura de exploración, vivencias del mundo que los rodea mediante la creatividad, promoviendo la alfabetización desde la generación de actividades innovadoras para el desarrollo de sus capacidades siendo protagonistas de su propia historia.



Características de la Escuela
La Escuela Albergue N° 8-417 “Rubén Darío”, se encuentra ubicada en la Ruta Nacional N° 7, departamento de La Paz, a escasos metros del Arco de Desaguadero y el límite con la provincia de San Luis. Su comunidad educativa cuenta con una matrícula de 154 alumnos, donde 35 niños y niñas pertenecen a nivel inicial, en salas de 3, 4 y 5 años, y 119 forman parte del nivel primario con divisiones únicas de 1° a 7° grado. Cabe destacar que los estudiantes externos concurren de lunes a viernes y son 11 los internos que ingresan los lunes y permanecen albergados hasta el viernes. Una institución que brinda un servicio de apoyo educativo y asistencial generando vínculos sociales con la comunidad.














Fuente: Prensa DGE