En el local de una escuela urbano/marginal, funciona en la siesta un CENS que constituye la única oferta educativa de la modalidad en la zona. Asisten a esa escuela jóvenes del contexto cercano y también recibe estudiantes provenientes del contexto agrícola. Un alumno de 19 años, que cursa el ciclo básico de secundaria, al día 30 de mayo no ha asistido regularmente a clase.
El alumno convive con su padre y dos hermanos uno de 15 años y otro de 10. Su madre falleció en 2020. No cuentan con teléfono ni conectividad propia. La única vía de comunicación es a través del padre en forma personal en su propiedad rural o en algunos horarios donde el padre tiene señal de teléfono. Los tres hermanos y su padre se dedican al cultivo de hortalizas, frutales y cría de animales.
En el ciclo lectivo anterior, el alumno presentó una asistencia intermitente llegando a alcanzar 100 inasistencias. Por ese entonces ante las entrevistas del directivo con el estudiante y su padre, este informó que el estudiante empezaría a asistir cuando terminara el período de cosecha, que recién ahí el padre estaría más tiempo en la casa y el hijo podría asistir a la escuela. Luego de terminada la cosecha la situación continuó igual.
En el presente ciclo lectivo, al 21 de mayo el alumno cuenta con 45 inasistencias y a la fecha registra muy pocas calificaciones de proceso.
Personal de la escuela ha dialogado con el joven sobre su trayectoria escolar sin lograr que la situación se modifique.
El directivo procede a realizar una visita domiciliaria, dialoga con el estudiante y su padre, quien manifiesta conocer la importancia de tener título secundario pero expresa que necesita la presencia del estudiante en el hogar debido a la cantidad de hurtos que se producen en la zona durante el día, que necesita que se quede a cuidar la casa. En el diálogo con el director el padre propone que el estudiante asista a clases una vez a la semana y que cuando el joven no pueda ir, él personalmente buscaría las tareas y se ocuparía de que las copie.
Dado que el estudiante asiste esporádicamente, el directivo considera que no hay nada por hacer.