Con esta iniciativa innovadora, la comunidad educativa fortalece las trayectorias escolares de sus estudiantes, y favorece el desarrollo del pensamiento histórico, la creatividad, la comunicación y el sentido de identidad nacional.
El jardín de 0-002 Dr. Gregorio Aráoz Alfaro, de Ciudad de Mendoza, y bajo la dirección de Mariana González, llevó a cabo una propuesta educativa integral que permitió a los niños y niñas aproximarse, de forma lúdica y significativa, a hechos históricos, y desarrollar sus capacidades y habilidades a través de un aprendizaje continuo y trabajo en equipo desde Nivel Inicial.

Se trata del proyecto pedagógico “Palabras de Mayo y Arte de Nuestra Historia” a cargo de la docente de Sala de 5 años, Ivana Sosa, cuyo eje central fue el trabajo con palabras socialmente significativas, en articulación con propuestas de alfabetización inicial, y que conformó una expresión artística mediante la realización de diversas actividades de manera contextualizada.
Las propuestas que fortalecieron el proceso de alfabetización consistieron en palabras con historia, conciencia fonológica y juego con sonidos; diario mural y escritura espontánea; vocabulario en contexto; alfabetización lógico-matemática: pensar, contar, comparar y construir.
De igual manera, sirvieron al objetivo anterior el arte como ventana a la historia, con obras del artista peruano Iván Cruz, cuya producción pictórica, llenas de movimiento, color y expresividad acercaron a los niños con una mirada histórica y cultural de comprensión y construcción de vínculos.
De esta manera, a través de la observación, interpretación, diálogo, técnicas, dibujo digital con Tux Paint, construcción de objetos tridimensionales, creación de un mural colectivo y juegos tradicionales, se transformaron en pequeños artistas, historiadores y narradores de su propia identidad.
Cabe destacar que la propuesta se integró a los proyectos institucionales de Alfabetización, Lógico-Matemática, Programación y Robótica y ESI, permitiendo, así, un abordaje transversal y significativo del contenido que culminó con una muestra artística abierta a las familias, en la que los niños y niñas compartieron sus producciones, relatos, juegos y aprendizajes. Esta instancia permitió visibilizar el proceso pedagógico y fortalecer los lazos entre la escuela y la comunidad.
Sosa expresó que “trabajar el arte en el jardín, especialmente en el marco de un proyecto tan profundo, fue una experiencia transformadora que se convirtió en un lenguaje poderoso, que nos permitió conectar con la historia, con nuestras emociones y con lo que nos rodea, desde un lugar genuino, sensible y creativo, y donde el aula se llenó de sentido, se convirtió en galería, en taller, en museo, en un espacio de juego, expresiones y reflexión”.
“Esta propuesta fortalece sus aprendizajes y el trabajo colaborativo y permite experimentar la belleza en lo simple de manera lúdica, con curiosidad y entusiasmo. Como docente, me sentí profundamente conectada con el proceso, guiando, acompañando y aprendiendo junto a los niños, trabajando el arte como una herramienta pedagógica central”, agregó la docente.



En tanto, la comunidad educativa del Jardín destacó ampliamente el compromiso, la participación activa y el entusiasmo de los niños en cada una de las actividades.
Estas experiencias no sólo promovieron aprendizajes curriculares sino también valores como el respeto, la cooperación, la identidad y el amor por la historia y la cultura nacional. Resultó una propuesta que sembró palabras, arte y memoria basados en valores, en cada rincón del aula y que trascendió a toda la comunidad.
Fuente: Prensa DGE