Reconstrucción: Los años de San Martín en Mendoza
Fuente: Gobierno de Mendoza y Canal Acequia
Fuente: Gobierno de Mendoza y Canal Acequia
Pedro Vargas era respetado, callado y se lo tenía por indiferente. San Martín le propuso hacerse pasar por realista para recabar información. El pacto fue sumamente secreto. De esta manera San Martín se enteró de todo lo se decía y lo que estaba pasando. Siempre le suministraba información fideligna.
Era indispensable para un ejército que se disponía a cruzar una de las cordilleras más altas del planeta que sus ropas estuvieran abatanadas, es decir impermeabilizadas. Andrés Tejeda molía granos y lo que hizo- como maestro mecánico e inventor- fue adaptar la maquinaria del molino hidráulico, para crear un batán cuyo propósito era machacar-abatanar las rústicas fibras- venidas desde San Juan, San Luis y Mendoza y convertirlas en fibras de paño- bayetas.
La figura del Gral. Don José de San Martín, representa, entre otros símbolos, el coraje, el compromiso, la valentía, la libertad e independencia alcanzada por
Posadas toma la decisión de nombrar a San Martín como Gobernador Intendente de Cuyo, atendiendo la solicitud del mismo, quien ya tiene su plan: llegar a Mendoza y, desde allí, organizar las campañas que le darían la independencia a Chile y luego a Perú.
La comunidad franciscana se instaló en Mendoza a fines del siglo XVII y levantó su convento y templo en la esquina de las actuales calles Montecaseros y Chacabuco. Producida la expulsión de los jesuitas, los franciscanos recibieron el templo y ex colegio de la Compañía ubicados en Ituzaingó y Beltrán en 1798.
La plaza más antigua en la vieja ciudad de Mendoza está circundada por las calles Fray Luis Beltrán al Norte; Juan Bautista Alberdi al Sur; Videla Castillo al Este e Ituzaingó al Oeste.
En la casa que la familia Segura poseía en El Plumerillo, existía un oratorio de cuyos oficios religiosos participaban el general San Martín y sus oficiales. Más tarde se construyó una capilla en un terreno que medía veintiséis varas y un cuarto de frente por cuarenta y dos varas y cuarto de largo. La construcción era de adobe con cornisas de ladrillo y techo de Bóveda. Poseía un coro cerrado con baranda de hierro. El altar mayor estaba realizado en ladrillo y yeso con su mesa y nicho para el Sagrado Corazón de Jesús.
Está ubicado en la actual calle Remedios Escalada de San Martín, entre Corrientes y Urquiza. El terreno fue adquirido por el Libertador en el año 1816 con la idea de establecer allí su hogar mendocino. Sin embargo, nunca llegó a habitar en él, porque al regresar de su campaña del Perú, se estableció en su chacra de los Barriales, viajando posteriormente a Buenos Aires.